Cómo influyen las emociones sobre la salud
La salud consiste en un estado de bienestar global tanto físico como psicológico.
Seguramente habréis escuchado decir que en la antigüedad, desde Hipócrates concretamente, la enfermedad estaba asociada a alteraciones de los estados anímicos. Afortunadamente, a principios del siglo XX se encontró que esto no era exactamente así, sino que la enfermedad se ocasionaba a partir de microbios y parásitos. Si bien es cierto que a finales del siglo XX hasta la actualidad se ha vuelto a poner el foco en la interacción que existe entre emociones y enfermedad.
Existen diversos estudios longitudinales que parecen aportar evidencia en relación a la esperanza de vida y probabilidad de enfermar, indicando que a mayor experiencia de emociones negativas, mayor probabilidad de enfermar y menor esperanza de vida. Lo contrario ocurriría con las emociones positivas. Además, las emociones negativas también predicen una menor capacidad de recuperación, mayor sensación de dolor y mayor amplificación de los síntomas. Las emociones negativas también tienen relación indirecta con la enfermedad, en el sentido de que afectan negativamente a la adquisición y adherencia a los hábitos de salud.
A pesar de todo lo anterior, no es cuestión de obsesionarse con estar siempre felices y contentos/as, sino más bien la clave estaría en no dejar de cuidarse durante los episodios negativos y saber gestionar las situaciones para proseguir y recuperar una actitud optimista lo más rápidamente posible ante cada uno de los problemas que nos depara la vida.
¡Feliz fin de semana!
Patricia Flor
Psicóloga Jurídica y Mediadora Familiar Col. CV14213
Centro de Psicología y Mediación Familiar Patricia Flor
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